Entre ocres y verdes

Los campos de labor, sus colores, las mezclas de ocres, verdes, rojizos, sus texturas de tierra arada, neblinas al amanecer, elevaciones del terreno, todo ello lleva al fotógrafo a un amalgama de información muchas veces difícil de reproducir, lo que hace de la composición fotográfica su mejor aliado, ordenar visualmente la información que tenemos.

En estos casos suelo componer guiándome por los colores, intentando dejar por ejemplo la mancha de color más vivo en uno de los puntos calientes de la fotografía, o por sus formas, llevando el ojo del espectador a la zona donde hay más elevaciones o un árbol predominante en el terreno, o unas líneas de arado que te invitan a recorrer toda la fotografía.